Ayúdame a olvidar nuestra hermosa soledad
de animales en celo
si tú me ayudas
te prometo no salir a buscarte en los espejos
o en el fondo de la taza de té.
Thelma Nava
En mi espacio la luz no parpadea, el tiempo se vacía de minutos, se ha detenido un pájaro en el aire. Octaviano. Octavas. María Malibrán llegaba a las 3. Cecilia Bartoli a las 2. Las horas del cielo. (Y las voces que todo esquizofrénico melómano debe poseer).
Habrá que levantar el cráneo lleno de palabras, dando un concierto de despedida en las venas, a lo Nora Carrillo: quizá en la sangre resuenen adagios y arpegios, que le brindarán la bienvenida al MP. Hay que seguir la dietética a lo Girondo, ingiriendo distancia, lanudos nubarrones (al fin que el vapor de agua y los kilómetros no tienen calorías). Habrá que impermeabilizar la corteza cerebral, para que las ideas resbalen, moribundas, a lo Coddou (los políticos vienen con cubierta de silicón de fábrica).
¿Cuáles son los engranajes de La lenta máquina del desamor de Cortázar?
Ah, en el Destino de Rosario no bastaban los elementos para dos. Al igual que ella, me inclino en el espejo y no veo a nadie; el de Borges es irreversible y de hierro. Hierro. (Tantos mexicanos con anemia ferropénica).
A la mañana siguiente Cesare Pavese no pidió el desayuno; aquí tampoco hay nadie a quién llamar, hay que tragarse las pastillitas y esperar la llegada de Morfeo –o de Tánatos, dependiendo de los designios arcanos- para auto-anunciarse la única certeza adquirida: que jamás volvería a dormir solo en un cuarto de hotel. José Luis Panero. Pan. (Santo olor de la panadería. Una de las pocas cosas que extrañaría de este mundo).
¿Por qué no habrían de rabiar los viejos, si una muchacha que supo todo Dante de memoria vivió para parir hijos a un necio? (Ay, mi amado Yeats, y eso que no le tocó el mundo surrealista mexicano).
Ojalá que la noche no se olvide de nadie –y menos del tiro de gracia de Mayakovsky mientras la memoria recorre en la sala del cerebro las filas inagotables de los amados (nadie en las primeras filas, todos en una bacanal romana en las últimas).
¿Fumado? ¿Raro? Raro es –según Ruiz Trujillo- por ejemplo, soñar el dolor/en el sueño abrir una herida de la que broten pájaros/con alas necesarias como el agua. Agua. Tierra. (El árbol del pan del jardín, con sus múltiples nidos de tórtolas y gorriones –ése que mi madre creía que daría toronjas-).
Vale, no vuelvo a tomar un litro de expresso en un buen rato, y continuaré mi medicación neuroléptica.
¿Qué importancia tiene todo esto,
mientras haya en mi barrio una mesa sin patas,
un niño sin zapatos o un contable tosiendo,
un banquete de cáscaras,
un concierto de perros,
una ópera de sarna?
Gloria Fuentes.
12 comentarios:
Ay querida Aurore
Esto es tan genial, como demoledor.
"¿Por qué no habrían de rabiar los viejos, si una muchacha que supo todo Dante de memoria vivió para parir hijos a un necio?"
Me pregunto si ella, la que vivió para parirle hijos al necio (y quizá borracho y golpeador), en algún momento, deseó apurar el último tranco y de plano irse derecho hasta el séptimo círculo dantesco.
Besos desolados
Me encanta! ...
en mi espacio la luz no parpadea, el tiempo se vacía de minutos, se ha detenido un pájaro en el aire..."
lo que sigue de Octaviano solo me interesa que de 2-3 eran sus horas de cielo, o me equivoco?
sus horas de amor?
que locura!
un abrazo Aurore!
vaya manera de hacer volar la imaginación...
=D
Queridísima:
Como dijera Garfield "No lo puedo evitar, soy esclavo de mis pasiones" Bajo la mirada del minotauro... por algo le confiaron la custodia del séptimo círculo.
(Realizo inmersiones en el Flegetón como abluciones matinales).
El poema de Yeats es excelso, querida, todas sus líneas son lapidarias de la sociedad; pero la chica Dantesca... es sublime (es una realidad Dalinesca, Boschiana... real). Sí, yo también me he preguntado del final trágico -a lo Eurípides- de esa mujer.
"Algunos piensan que es cosa natural que el destino
Deba matar de hambre a los buenos
Y a los malos hacerles progresar;
Que si sus vecinos imaginaran claramente,
Como en una pantalla iluminada,
Ni una sola historia encontrarían
De una mente feliz que no quebrara,
O de un final digno del comienzo".
Besos Yeatsianos.
Ana:
Lo que sigue de las líneas de Paz son mis divagaciones kaffeinadas: de María Malibrán se comenta que "llegaba a las tres octavas tranquilamente" una proeza vocal difícil de superar; algo que ha logrado Cecilia Bartoli (¡amo a esa mujer!)-aun cuando he dicho que llega a las dos, por puro juego de palabras para las horas-
Saludos mezzo sopranos.
Sin mencionar de nuevo a Cortázar (de mis favoritos) por ser un tanto muy redundante, recuerdo una frase de la película Donnie Darko: "todo ser viviente muere solo". La soledad es nuestro sino. La inmensa mayoría de las veces, en esa fortaleza que llamamos cerebro.
Kyuuketsuki:
Así es. Y sin embargo, Aristóteles nos planteaba la dicotomía de bestias o Dioses. Mmm... Para Schopenhauer era la suerte de todos los espíritus excelentes.
Saludos excelsos.
Querida Aurore
Ese poema es como dices: lapidario
Recuerdo la primera vez que leí un poema de Borges (Ausencia), me pareció tan desolado, pero comparándolo con el de Yeats, Borges es casi luminoso.
"¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva y despiadada?"
Besos madrugadores
Queridísima:
Borges era casi divino... fue Dios de las palabras.
Por mi parte
"He cometido el peor de los pecados
que un hombre puede cometer. No he sido feliz".
Besos melancólicos.
Bárbaro! En efecto el humano es un animal de soledades, pero alguien a quien recurrentemente se le olvida estar consigo mismo.
Saludos pro-colectivismo!
Dr. Gurma:
Por eso me gustan los pitufos socialistas.
Saludos comunales.
Aurore, me aterras -je-
pero igual sigue ingiriendo distancia, nubarrones y ríos de expresso sí eso te hace obsequiarnos posts como éste
Malbicho:
Y eso que no has visto mi lado pyscho.
Saludos unilaterales.
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